Se manifiesta por lo general en la parte inferior de las paredes, tornándose los cambios muy notables a la vista. Podemos observar claramente las manchas, ampollado o caída de pinturas para terminar finalmente con el deterioro de los revoques.
Esto afecta estéticamente los ambientes, produce frío y humedad en las habitaciones. Genera problemas de salud, especialmente en los niños.
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